El médico suspendido por el Insssep estaría facturando a nombre de otro

16.12.2012 11:01

 

Lo Denunciaron En La Policia Y En La Obra Social

 Estaría atendiendo en el Sanatorio Antártida y cobrando la consulta. Una mujer denunció que no le quiso dar factura de lo abonado por una operación. Además se quejan por el trato y temen que no haya sido él quien realizó la intervención.



Una mujer denuncia que fue engañada en el Sanatorio Antártida, donde su hija fue operada por un residente. Además aseguran que el médico suspendido por el Insssep por cobrar plus propuso atenderla con la obra social, pero a nombre de otro profesional.
La denuncia fue realizada en la Policía del Chaco y en las oficinas de Antiplus y de Asesoría Legal del Insssep. Pidió que se accione penalmente por el delito que diera lugar contra César Aníbal González, quien desde el 30 de  noviembre estaba suspendido por el término de un mes.
Según relató Lidia Graciela Abatte, concurrió al Sanatorio con su hija (de 23 años) quien tenía problemas ginecológicos (inflamación de glándula Bartolini). En el lugar fue atendido por González, quien aseguró que debía intervenir quirúrgicamente, aclarando que no atiende con la obra social de la provincia, por lo que debía cobrar $300 la operación; lo que fue aceptado por las pacientes.
Más de media hora después de que la joven ingresara al quirófano, el hombre se hizo presente en la sala de espera y preguntó a la señora Abatte por su hija, siendo que supuestamente él la estaba operando.
La mujer asegura que el profesional no se encontraba con la ropa adecuada para realizar una operación (camisa y pantalón). «González me dijo que sí, que él la había operado, pero que se quedó en el quirófano entretenido», relató.
Más tarde le solicitaron a la secretaria del profesional una factura por el importe que había pagado, para poder realizar los trámites en el Insssep y así recuperar su dinero. Fue recién ahí cuando se enteró que González estaba suspendido, por lo que la operación había sido realizada en nombre de otro médico; lo que hace dudar, incluso, que él haya intervenido realmente a la joven.
Unos días después la hija de Abatte volvió al sanatorio para ser revisada –debía quitársele el drenaje-; el médico la atendió, pero no se acordaba de ella y no la revisó, según cuenta la señora en su denuncia, pero de todos modos le cobró $100 la consulta.